Night Train to Terror es una auténtica curiosidad. Como si de un monstruo de Frankenstein cinematográfico se tratara, esta película de sketches recoge retazos de varios otros largometrajes (en concreto: Death Wish Club, Cataclysm y la interminable Scream Your Head Off) enlazándolos con una oscura historia de trenes, en la que Dios y Satán discuten sobre el destino de la humanidad. Es divertidísima, se pone al día como puede pero se sale de madre en varias ocasiones para deleite de los fans del kitsch bis, el rock ochentero y el gore casero.